"El éxito se mide por el número de ojos que brillan a tu alrededor". Benjamin Zander
Hace ya varios días que Kevin Strootman, pieza fundamental en la Roma y en la selección neerlandesa, sufrió una lesión de gravedad (rotura de ligamentos en la rodilla izquierda) durante el encuentro que su equipo disputó frente al Nápoles. Lesión que, en el peor de los casos, le podría tener hasta nueve meses alejado de los terrenos de juego. Es una obviedad que, teniendo en cuenta lo anterior, el centrocampista se perderá el Mundial de Brasil. Y debido a la importancia que esto conlleva se ha generado un interesante debate sobre quién está más capacitado para sustituirlo en la Copa del Mundo. Debate en el que voy a indagar.
En primer lugar cabe destacar que, pese a que la habitual formación de los Países Bajos es un 4-2-3-1, estoy seguro de que, debido a la dificultad de su grupo (España, Chile y Australia), en algunos partidos saldrá –como es lógico– más protegido, con un 4-3-3. Por lo tanto, lo ideal será analizar las posibles variables del mediocampo con ambas formaciones.
Respecto al 4-2-3-1, a la hora de formar el doble pivote, creo que los dos jugadores más capacitados para dicha labor son Clasie y Schaars. Ambos son de corte defensivo, con consistencia, recuperadores, apenas conducen el balón y suelen jugar en corto. Ninguno destaca por su llegada al área ni por ser un gran asistente, pero en este caso no es eso lo que se les va a pedir. Con este esquema, por delante de ellos, de diez, jugará Wesley Sneijder (al que sí se le va a pedir que dé asistencias, llegue al área y tire a puerta), dejando así las bandas para Robben y –en mi opinión– Memphis Depay (aunque en la posición de extremo izquierdo también hay debate) y la punta de ataque para Van Persie (si está al cien por cien, Huntelaar deberá esperar en el banquillo).
Por otra parte, en referencia a los partidos en que salga con un trivote (supongo que contra España y, tal vez, contra Chile), el abanico de posibilidades se vuelve más amplio. Con Clasie y Schaars ocupando dos de los tres puestos, la plaza vacante sería para Blind, Nigel de Jong o Klaassen. Antes de analizar las tres opciones, es necesario afirmar que con esta formación Depay (o el que juegue en su lugar: Boëtius o Quincy Promes) sería el sacrificado, quedando así Robben en la derecha, Van Persie en punta y Sneijder ligeramente escorado –y algo más retrasado– en la izquierda (no es donde mejor rinde, pero en el Galatasaray a veces se mueve por esa zona del campo).
Volviendo al tema, en el caso de Blind hablamos de un lateral izquierdo que también puede jugar de pivote, pero esto generaría dos problemas. Si Blind se sitúa en el medio, lo más normal es que Martins Indi pase al lateral izquierdo (a no ser que Willems mejore notablemente de aquí a poco más de dos meses). Esto supondría que un central titular (Indi) y el lateral izquierdo titular (Blind) abandonarían su posición natural y ocuparían demarcaciones en las que su rendimiento, como es lógico, no es tan alto. Personalmente, esta opción no me termina de convencer.
Quizá la opción menos probable sería que De Jong compartiera medular con los ya mencionados Clasie y Schaars. Supondría una clara declaración de intenciones a no tener el balón, llevar a cabo una agobiante presión y salir al contragolpe; y pese a que es la opción que, con diferencia, menos me convence, para nada la descarto. Cosas más raras se han visto.
Como tercera y última posibilidad estaría la de alinear a Klaassen junto a Clasie y Schaars. Aquí la cosa cambia. A diferencia de los anteriores, Davy Klaassen es un centrocampista más llegador, al que le gusta tener el balón y con una interesante capacidad anotadora –descubierta esta temporada– que juega muy a su favor. Ni tan ofensivo como Sneijder ni tan conservador como Schaars o Clasie. Para mí es, sin duda, la opción más adecuada de las tres.
También es necesario acordarse de Tonny Vilhena. Debido a la lesión de Strootman, Vilhena podría tener alguna posibilidad de entrar en la lista definitiva de 23. A priori no parece un hecho muy relevante, pero lo cierto es que supondría una enorme oportunidad para un centrocampista que todavía es juvenil (1995).
* Javi Palen.
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