La lotería nunca toca dos veces seguidas (1ª parte)

por RAFAEL LEON el 24 abril, 2012 • 6:15

A) Lo que pasó en Stamford Bridge

A pesar de su sólida defensa, de la amenaza constante de Drogba, de las brillantes galopadas de Ramires, de la sensación de peligro que dieron en el juego aéreo y de haber vuelto Cech al nivel de los mejores guardametas, sólo la más absoluta de las suertes permitió ganar al conjunto inglés en Stamford Bridge. Y ello porque:

1.- Un Chelsea que defendió brillantemente con el mejor John Terry, escoltado por todos sus compañeros sin excepción, con un 9 que también trabajaba, un 10 incrustado en la banda para únicamente proteger acompañado un cuarteto de férreos centrocampistas comandados por el acordeón Obi Mikel y defensas extremadamente contundentes, recibió 24 remates (7 de ellos entre los 3 palos y dos estrellados en la madera). Y no se chutó por chutar (el Barça nunca lo hace), sino que, en su mayoría, fueron ocasiones manifiestas: gol salvado sobre la línea por Cole, remates a bocajarro incomprensiblemente fallados por Fàbregas, Busquets y Alexis, espectaculares paradas de Peter Cech, dos lanzamientos a la madera… Brillante producción ofensiva teniendo en cuenta el nivel del rival, su planteamiento y la buena ejecución del mismo. Y todo ello sin quemar todos los cartuchos ofensivos, priorizando mantener la posesión y la posición para evitar pérdidas con el objetivo de no sufrir contras (ejemplo paradigmático fue la escasa utilización que se hizo de las bandas; Pep, en la decisión errónea para algunos de no atraer por fuera con extremos para terminar por dentro y limitar al máximo el desdoblamiento de los laterales; de precaución extrema para mí, no las quiso utilizar), cosa que consiguieron durante 94 minutos del encuentro.

2.- En una noche espectacular de Drogba quien, como advertíamos, fue titular y dio el nivel de sus mejores noches, éste sólo pudo rematar una vez, la del gol. Tampoco pudo generar ocasiones para su equipo, ya que el sometimiento mayúsculo al que había sometido el Barça a su rival y las brillantes coberturas defensivas tras haber sido superado un compañero lo impidieron. Sólo en 4 o 5 ocasiones pudo ser decisivo: la del gol y las de las pérdidas de tiempo, imprescindibles para dar oxígeno a sus compañeros, con una interpretación digna de su excelente nivel futbolístico.

3.- La única galopada en la que Ramires creó peligro vino precedida del exclusivo error grave del Barcelona en todo el partido: el de Messi (al que cabría añadir, aunque siendo menos reprochable por la velocidad de la acción, el de Mascherano dejando libre al 9 marfileño en esa misma jugada). De las pocas veces restantes que le dejaron correr con el balón, la mayoría no llevaron peligro y la única que sí lo tenía fue cortada por Busquets, eligiendo bien la acción para gastar una tarjeta amarilla.

4.- Por mucha sensación de peligro que dieran los ingleses las pocas veces que aparecieron por el área del Barça, sólo una vino precedida de un córner (ninguno más concedió el conjunto de Pep: excelente). El resto provinieron de saques de banda colgados al área “a lo Stoke City” en los que, por muy potente que sea el lanzamiento y por muchos rematadores especialistas que tengas, es muy difícil conseguir un remate limpio. Esto fue exactamente lo que sucedió.

5.- Cech también rindió a su mejor nivel, el de un portero que compite con Valdés y Casillas (probablemente ya también con Neuer) por ser el mejor portero del continente. A pesar de ello, en cuatro de las clarísimas ocasiones de su rival no intervino. A saber, los palos y los rechaces increíblemente fallados por Cesc y Busquets. Esto hace, que con sólo un poco más de suerte (y de acierto en los casos de Fábregas y Sergio), a pesar de su gran partido, habría podido encajar varios goles.

De lo expuesto se infiere que, de no ser por la fortuna, no sólo no habría ganado el conjunto londinense, sino que habría perdido con claridad (justo lo que necesita el Barça para voltear la eliminatoria). Suerte respaldada por falta de acierto pero, al fin y al cabo, ¿qué otro factor sino el azar hace que un balón, después de tocar en la madera, salga repelido o se introduzca en la portería? ¿Cómo se explica, si no, que jugadores (particularmente Cesc) a los que, en algunos momentos de la temporada, les entraban todas, no acertaran en las ocasiones más sencillas? ¿No significa que te toque la lotería que, en un mismo partido, tengas tanta suerte tantas veces?

– 2ª parte: La lotería nunca toca dos veces seguidas

* Rafael León Alemany

– Fotos: Chelsea CF – Miguel Ruiz (FC Barcelona) – EFE