Leno brilla en el Donbass Arena
Shakhtar y Bayer empataron a cero en un partido que se pudo resolver a favor de los locales. El joven guardameta alemán Bernd Leno estuvo soberbio contabilizando una actuación meritoria tras otra, sobre todo en el primer tramo del partido.
El conjunto de Lucescu fue más reconocible si lo comparamos con el de las últimas temporadas en el día de ayer, aunque no tuvo la contundencia de antaño, cuando contaba en sus filas con jugadores tan diferenciales como Fernandinho, Willian y Mkhtaryan. El Bayer Leverkusen vive cómodo cediendo la iniciativa al rival, y durante la primera media hora se atrincheró en su zona defensiva y se amparó en Leno para mantener su puerta a cero, garantía de un empate que le beneficiaba en la clasificación del grupo.
MOVILIDAD E INCORPORACIONES DE LOS LATERALES
Douglas Costa, Alex Teixeira y Bernard formaron la línea de tres por detrás del Chuky Ferreira en el ataque ucraniano. Hubo movilidad y el punto de electricidad necesario, pero faltó contundencia y, por qué no decirlo, algo de fortuna para definir. Spahic y Toprak, los centrales del Bayer, se convirtieron en antiaéreos para neutralizar los centros laterales, sobre todo los de Srna, que asomó mucho por su carril derecho con un espectacular centrochut al palo incluido. Las llegadas de los laterales son clave en el funcionamiento colectivo del conjunto de Mircea Lucescu.
El mediocampo alemán, formado por Rolfes en el mediocentro y Bender y Castro como interiores, trabajó a destajo, pero en la primera parte tuvo dificultades. Encontró oposición en Fernando y Hübschmann, los mediocentros de trabajo y recuperación del Shakhtar, y a su espalda se colaban permanentemente los tres mediapuntas. Mención especial para el menudo Bernard, que hace daño arrancando desde la izquierda hacia dentro, y pese a que carece de regularidad, su habilidad es dañina cuando pisa el área contraria. Ayer fue titular y tiene condiciones para convertirse en un buen jugador, pero su evolución aconseja calma.
EL DESPERTAR DE SON Y SAM
El segundo acto igualó las fuerzas. Los contragolpes del Bayer eran más peligrosos. El surcoerano Son y el alemán Sam emitieron señales de vida y además venían descansados, ya que Sami Hyypiä los reservó en la derrota liguera en casa del colista de la Bundesliga, el Eintracht Braunschweig. Kiessling era un buen receptor del primer pase directo y ayudó a sus compañeros en el asentamiento en el campo contrario. Entraron Emre Can y Hegeler por Gonzalo Castro y Song para revitalizar el mediocampo y la zona de tres cuartos en el tramo final del encuentro.
Al Shakhtar le fue pesando el paso de los minutos en su ritmo ofensivo, aunque tuvo arrestos para rondar el área de Leno en varias ocasiones más. Lucescu prescindió de Bernard pronto en la segunda parte –aún se le hacen largos los noventa minutos– y fue refrescando la línea de tres mediapuntas, donde el equipo tiene toda la dinamita. Minutos después entró Taison por Douglas Costa y finalmente cambió el nueve. Buscó un jugador más posicional de área como Luiz Adriano, prescindiendo de la movilidad del Chuky Ferreira para los últimos diez minutos.
No se movió el marcador y mucha responsabilidad la tuvo Bernd Leno. Es obligatorio nombrarle al principio y al final de este análisis. Todos tienen vida en el grupo, pero a dos jornadas del final el United y el Bayer parecen tener más cerca el objetivo de llegar a octavos de final.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: Bongarts
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