En junio de 2011, al terminar la primera temporada de José Mourinho en el Real Madrid, el club blanco decidió ejercer la opción de compra que tenía sobre un canterano que jugaba en el Espanyol: José Callejón. El fichaje pilló a muchos por sorpresa, pero Mourinho confiaba en él y acabó justificando su vuelta al club blanco.
En su primera temporada cumplió con creces y se ganó el cariño de la afición madridista. Participó en 36 partidos anotando 13 goles, con un promedio de un gol cada 106 minutos, una marca bastante buena para un suplente que solía jugar en la banda derecha. Sustituto natural y habitual de Di María, aunque bastante por debajo del argentino en casi todos los registros. Sólo en el gol, cualidad que le ha definido a lo largo de toda su carrera, quizá superaba al Fideo. Su habilidad en el desmarque, aprovechando su velocidad para coger la espalda a la defensa, le facilitaba generar ocasiones de gol, normalmente encarando ya al portero. En lo que quizá más se parecía a Di María, y seguramente porque Mourinho insistía en este punto, era en la solidaridad defensiva, en la recuperación y el apoyo al lateral. Electricidad, velocidad, trabajo y gol. Las cuatro palabras que mejor le definen y las que le hacían ser el suplente perfecto para su entrenador. Quizá su mejor momento fue en un partido en Mallorca que se le había complicado al Madrid y en el que anotó el 1-2 definitivo en el minuto 84 que daba los 3 puntos a su equipo.
Su segundo año no fue tan positivo y estuvo más lleno de sombras que de luces. Jugó casi 1.000 minutos más, pero anotó sólo 7 goles. Perdió lo que le hacía diferente. Poca precisión en los pases, regates fallidos, mala toma de decisiones… Nervioso, falto de confianza. Por momentos no había ni rastro del jugador de la 11/12. Lo que sí se mantuvo siempre fue la generosidad a la hora de correr, de trabajar para el equipo, de jugar en cualquier posición (lo hizo en ambos laterales de forma eventual) con tal de aportar cosas positivas. Muestra de ese otro rol fue el Madrid-Barça de liga, en el que formó un doble carrilero derecho con Essien, alternando posiciones con el ghanés y desactivando al Barcelona por esa banda. En líneas generales, más voluntad que acierto.
En resumen, su compromiso siempre ha estado fuera de duda y su aportación como suplente fue positiva, aunque en la última temporada no rindió al nivel esperado. Su lugar en la plantilla parece que lo ocupará Jesé, que también puede desbordar y marcar goles desde el banquillo, seguir formándose como jugador e intentar asentarse en el primer equipo del Real Madrid. En este sentido, por planificación y para acoplar al canterano, la venta cobra aún más sentido. Calleti, a sus 26 años, buscará minutos en el Napoli, donde también partirá como suplente en una plantilla de calidad que quiere afrontar con garantías las tres competiciones que disputará bajo el mando de Rafa Benítez. Si Callejón mantiene su entrega, tendrá oportunidades. Habrá que ver cuál de sus versiones nos ofrece.
* Juan Zubiría. Sitio web: desdelazonamixta.wordpress.com.
– Foto: EFE
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