"Volved a emprender veinte veces vuestra obra, pulidla sin cesar y volvedla a pulir". Nicolás Boileau
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Inter, Milan, OM, CSKA, Zenit, Besiktas y media Premier League se han interesado por este delantero con pinta de luchador que no sonríe ni cuando marca. Es el máximo goleador de la última Eredivisie: 31 goles y 8 asistencias en 30 partidos con lo que el Vitesse obtendrá un buen beneficio por el traspaso. Pagó hace algo más de dos años cuatro millones de euros por el costamarfileño al Sparta de Praga.
Potencia. Wilfried es muy fuerte y sus piernas mucho más que eso. El tren inferior es brutal. Le permite saltar más alto y flotar más tiempo que el resto. También recortar y armar el disparo sin necesidad de posturas ventajosas. Y, unido a su técnica gestual, consigue proteger el balón entre sus piernas en parado como sólo he visto a un tal Makelelé. En carrera, más allá de los primeros metros, no destaca por su velocidad. Pero por lo visto anteriormente hay que estar bien armado para aguantarle hombro a hombro. Porque en carrera también utiliza todo su cuerpo con inteligencia.
En el equipo donde juegue la próxima temporada será el ‘9’. En el Vitesse hay dos Bonys. Uno de espaldas a portería y otro de cara.
Este último es un delantero con instinto goleador, que sabe cuando llegar a zona de remate sin vivir en ella. Este Wilifried es un nueve goleador al que a veces le colocan un jugador por delante. Así puede servirle balones, prolongar de cabeza y aprovecharse de su lectura de la llegada y la segunda jugada. Prefiere el balón al pie que el desmarque de ruptura que sí suele ejecutar cuando hay muchos metros a la espalda del central.
El otro Bony es el que juega de espaldas a portería aguanta el balón o toca de primeras en los múltiples desmarques de apoyo que realiza por todo el ancho del campo. No la pierde nunca. Gana los balones que rifa su portero para prolongar o dar de cara. Este Wilfried es un ‘9’ generoso y solidario. Mientras sea su equipo el que tenga el balón, eso sí, porque se desconecta sin él. Aunque sí es una buena herramienta en las jugadas de estrategia en contra.
Determinante al primer toque con ambas piernas y de cabeza en los balones colgados al área. Con un buen disparo desde la frontal que arma rápido y en el que confía por encima del pase al compañero. Mucha sangre fría delante del portero. Es inteligente con y sin balón y tiene cierta pausa sudamericana que suele faltar en África.
* Artuto Paz.
– Foto: Action Images
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