Bauke Mollema avisa en Crans Montana

por RICARDO ALONSO-BARTOL el 9 junio, 2013 • 18:12

1.- Apareció Bauke Mollema en el momento clave para ganar la segunda etapa de la Vuelta a Suiza. El neerlandés saltó del pelotón en el último kilómetro y adelantó a Ryder Hesjedal para marcharse hacia su primer triunfo desde el 2010, cuando se impuso en la sexta jornada de la Vuelta a Polonia –hasta hoy era el único en su palmarés como profesional–.

2.- Regular a lo largo de toda la temporada, Mollema necesitaba un triunfo que realzara su candidatura cara al Tour de Francia, en el que se le espera como un animador en la pelea por la general. El del Blanco subió al podio en la Vuelta a Murcia y la Vuelta Andalucía y ha acabado entre los diez primeros en el Tour del Mediterráneo, Vuelta a Noruega, Critérium Internacional, Flecha Valona y Amstel Gold Race. Solo en la Tirreno-Adriático (21º) y Lieja-Bastoña-Lieja (77º) rindió por debajo de lo esperado, y en la Vuelta a Suiza ya ha cumplido.

3.- Esta segunda etapa –119 kilómetros entre Ulrichen y Crans Montana, puerto catalogado de primera categoría– vivió el resurgir de Ryder Hesjedal, que no pudo defender como esperaba su triunfo en el Giro de Italia 2012. El canadiense atrapó a su compañero de equipo Daniel Martin a falta de 10 kilómetros, acompañado por Tanel Kangert, Brice Feillu y Jesús Herrada, a los que fue dejando uno a uno. Pero pagó el esfuerzo, y una vez atrapado por Mollema supo que su pelea por la etapa había llegado a su fin.

4.- Siguió tirando de todas formas Hesjedal, sabedor de que la contrarreloj inicial de esta Vuelta a Suiza le posicionó de manera perfecta en la clasificación general –fue 9º a 19” de Cameron Meyer–, y a punto estuvo de asaltar el liderato. Sin embargo, el australiano lo salvó por solo tres segundos después de sufrir a lo largo de la última subida.

5.- Fue en Crans Montana donde se vivió lo más importante de la etapa, ya que el bajo kilometraje impidió que la fuga –formada por Christophe Riblon, Adrián Sáez de Arregi, Enrique Sanz y Johannes Frohlinger– pudiera disfrutar ni siquiera de tres minutos de ventaja. El cuarteto fue incluso neutralizado por el pelotón antes de que comenzara la ascensión final, en una etapa que debería haber contado con un puerto más: el Nufenenpass, de categoría especial, fue eliminado por las condiciones meteorológicas.

y 6.- En este puerto de pendiente tendida, una treintena de ciclistas llegó a menos de un minuto de Bauke Mollema, entre ellos la mayoría de los favoritos. Uno de los que falló fue Andy Schleck, que cedió 3’32” y vuelve a dar su versión más pobre con el Tour de Francia cada vez más cerca.

* Ricardo Alonso-Bartol es periodista.

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– Clasificaciones: Pro Cycling Stats

– Foto: Roberto Bettini