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1.- El Bayern München se ha clasificado para las semifinales de la Liga de Campeones asolando a la Juventus de Turín en cuartos. Cuatro goles a favor y ninguno en contra dejando una sensación de solidez abrumadora sobre un rival como es la Vecchia Signora, acostumbrada a mandar en todos los partidos de su campeonato local y que ha sufrido en sus carnes una impotencia absoluta.
2.- La Juve encaró bien el partido de vuelta. Su puesta en escena fue adecuada, con Padoin en sustitución de Lichtsteiner y con Pogba como interior en lugar del otro jugador sancionado junto al suizo, el chileno Arturo Vidal. En los primeros minutos llevó el peso del juego e intentó lastimar al Bayern con sus señas de identidad, descolgando al dúo Pogba-Marchisio y con el estilista Vucinic trabajando la espalda de Schweinsteiger y Javi Martínez para descargar hacia los costados y aguantar la llegada de los escuderos de un desaparecido en esta eliminatoria Andrea Pirlo.
3.- La primera vez que el Bayern se asomó al partido cerca del minuto 20, lo hizo con una jugada que enmudeció el Juventus Stadium. Ribery abandonó su costado izquierdo en una acción habitual en el francés para asociarse con Robben y entre ambos generar una ocasión para que Mandzukic rozase el tanto; su remate en el palo corto estuvo cerca de adelantar a los bávaros. Mandzukic es un delantero completo que aprieta la salida del contrario, que se ofrece, posibilita la segunda jugada peinando de cabeza, deja balones de cara y busca todos y cada uno de los balones ofreciendo desmarques equivalentes a soluciones para sus compañeros por fuera y por dentro.
4.- Con Müller de nuevo sobre Pirlo y Schweinsteiger y Javi Martínez al mando, poco a poco el Bayern iba pasando de nuevo, como sucediese la pasada semana en Múnich, de la nevera al congelador. Los juventinos no encontraban a su regista Pirlo en la salida y buscaban directo a Vucinic. El montenegrino maneja una sensibilidad especial para recibir de espaldas y habilitar a sus compañeros, pero con Lahm y Alaba menos ofensivos que de costumbre en el primer acto, Padoin y Asamoah no podían ganar la línea de fondo y la Juve se convertía en un embudo fácil de defender por los pupilos de Jupp Heynckes.
5.- Lahm, Boateng (sustituyó a Van Buyten por un golpe en el primer acto), Dante y Alaba no sufrían ninguna agresión ofensiva de la Juve, y en el comienzo del segundo acto el Bayern fue desplegando todos sus soldados sobre el tapete con un aire imperial. Schweini y Javi Martínez agigantaron su presencia aún más y gobernaron el partido con total autoridad. Robben fue creciendo y absorbiendo protagonismo ofensivo. La Juve se fue haciendo más pequeña aún con mucha distancia entre sus líneas.
6.- Una falta lateral que botó Schweinsteiger la remató Javi Martínez, Buffon rechazó el disparo y Mandzukic apuntilló de cabeza el 0-1, sentenciando la eliminatoria. La superioridad posicional del Bayern en el partido era muy difícil de neutralizar por parte de la Juve, independientemente de los cambios que pudiese hacer Conte. Las sustituciones de Matri por Quagliarella, Isla por Padoin y Giaccherini por Marchisio no cambiaron nada el panorama.
7.- La última media hora fue muy sencilla para los alemanes, que tenían posesiones largas con el equipo bien distribuido llevando a la Juve a un hastío que le imposibilitaba la recuperación y le fatigaba en exceso. Heynckes dio entrada a Claudio Pizarro, un delantero que en tramo final de su carrera pide poco y da mucho cuando se le requiere. Anotó el 0-2 cruzando bien el balón tras una buena asistencia del omnipresente medio centro teutón hoy Bastian Schweinsteiger, que ha firmado un encuentro marcado por una palabra: jerarquía.
8.- La eliminatoria deja una lectura para cada equipo. Para la Juve, que ya está de nuevo a las puertas de la súper élite europea. El camino es el correcto y ha caído ante el equipo más en forma del viejo continente en estos momentos; quizá ante otro rival hubiese llegado a unas semifinales, lugar que si todo transcurre con normalidad no tardará mucho tiempo en saborear.
y 9.- El Bayern es ahora mismo un gigante temible, un equipo que maneja varios registros de juego, con puntos débiles, como su pareja de centrales y la irregularidad de Neuer, poco exigidos en la eliminatoria, pero con un funcionamiento colectivo extraordinario unido a individualidades que marcan las diferencias. Quizá el máximo favorito para conquistar Wembley ahora mismo.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: AFP
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