"Cada acto de aprendizaje consciente requiere la voluntad de sufrir una lesión en la propia autoestima". Thomas Szasz
Selecciones / Fútbol 2012-2013 / Fútbol
1.- El juego de toque y asociación que realiza la selección española necesita de más determinación que la mostrada en el primer acto. Con el balón, España se ha mostrado demasiado parsimoniosa. Sin posibilidad de romper la monotonía con una diagonal del ausente Xabi Alonso por un lado, ni la opción de último pase sin el ausente Xavi Hernández por el otro. Del Bosque ha rodeado a Busquets de futbolistas de buen manejo como Cazorla, Iniesta y Mata, pero el toque ha sido inerte, carente de la capacidad de distracción necesaria para generar peligro con continuidad.
2.- Tabárez está buscando alternativas para enderezar a su selección camino al Mundial de Brasil 2014. En lo que llevamos de la fase de clasificación ha ido variando su defensa. Línea de cuatro en algunos partidos y tres centrales con dos carrileros en otros, pero ha mostrado fisuras de las dos maneras. Una de las señas de identidad de esta selección celeste es la solidez y en los últimos tiempos la estaba perdiendo. Hoy ha formado con defensa de cuatro y una sorpresa en mediocampo, la presencia de Lodeiro, muy retrasado, junto al estajanovista “Ruso” Pérez.
3.- Otra de las cualidades de Uruguay en el pasado Mundial y en la última Copa América fue la presencia de dos mediocentros defensivos, agresivos y con mayor capacidad de sacrificio que de creación. Quizá para paliar esta carencia, Tabárez ha retrasado a Lodeiro junto al “Ruso” Pérez en el mediocampo. Nico Lodeiro es un jugador que puede marcar diferencias cerca del área, más retrasado pierde peso en el juego.
4.- El gol de Cesc, situado hoy de nuevo en la posición de falso delantero centro, tras un disparo lejano en el que falló estrepitosamente Muslera al intentar despejar el balón, adelantó a España en el marcador. El gol no era reflejo de un dominio contundente. En las pocas ocasiones en las que España apretaba arriba, Uruguay se quitaba el balón de encima, pero no lo ha hecho con continuidad en la primera parte y Uruguay ha ido creciendo en el partido, compitiendo como ellos saben hacer como nadie.
5.- España permitía que un equipo poco dotado para asociarse como es Uruguay pudiese hacerlo cada vez más. Cáceres, un diestro reconvertido a lateral izquierdo, iba ganando metros y sin sufrir presión alguna conectó por dentro con el “Cebolla” Rodríguez. El jugador del Atlético de Madrid empató el partido finalizando bien ante Valdés.
6.- La jugada del empate no define a esta selección charrúa. Sí lo hace el juego directo con el que Cavani le ha ganado la posición al centenario Puyol en un par de ocasiones. Cavani necesita jugar en punta y no tanto con caída a una banda como hace muchas veces en esta selección. La presencia de Luis Suárez le obliga a escorar su posición y ahí pierde eficacia.
7.- Uruguay consigue más rédito del juego directo porque no tiene un jugador para llevar la iniciativa con la posesión. En el Mundial de Sudáfrica, Arévalo Ríos hizo un torneo portentoso equilibrando el equipo aunque sus características sean de un jugador de contención. En la Copa América fue Diego Forlán el encargado de unir al equipo en el terreno de juego. Hizo un torneo monstruoso multiplicando sus funciones. Ni uno ni el otro son ya los mismos y de ahí que Tabárez haya retrasado a Lodeiro buscando alguien capaz de hacer esa función, pero no parece preparado para ello.
8.- La entrada de Villa por Mata en el descanso suponía para España la posibilidad de tener otro futbolista con capacidad de ruptura de un modo más directo. En la primera parte sólo lo intentaba Pedro. Ese cambio y subir la línea de presión unos metros propició que España pasase a dominar el partido completamente. La presión alta posibilitó un robo de Busquets a Godín que terminó con la pelota en los pies de Piqué. Su pase a Pedro lo aprovechó el canario cruzando bien el 2-1 ante Muslera.
9.- El tercer gol de España ha venido fruto de una gran maniobra de Cesc, en un pase fantástico, para que Pedro ganase el segundo palo e hiciera el 3-1. El carrusel de cambios clásico de estos partidos amistosos dificulta el análisis del juego, pero en la segunda parte España ha sido más reconocible llevando el peso del partido con el control del balón y del juego, con un gran Isco en los minutos que ha jugado. Uruguay respondía con contras buscando la velocidad de los diabólicos Suárez y Cavani, que terminó siendo sustituido por Forlán.
10.- Isco puede ser un jugador muy importante en los próximos años para la selección española. Maneja de maravilla la zona de tres cuartos, es capaz de regatear, asistir y tirar, tiene capacidad para asociarse, aspecto clave para ser importante en el estilo con el que juega España, y combinarlo con un juego más vertical y directo en otras ocasiones.
y 11.- El partido no dio para mucho más. Ambas selecciones terminaron siendo reconocibles pese a los cambios y el paso de los minutos. España parece que afrontará el partido decisivo de clasificación en Saint-Denis el próximo mes de marzo ante Francia con Cesc, magnífico hoy, como falso delantero centro. Uruguay sigue con una carencia evidente para elaborar juego en la zona ancha. Debe recuperar su solidez defensiva de antaño y buscar la forma en que rindan mejor sus magníficos delanteros para tener opciones serias de llegar al Mundial y poder defender la cuarta plaza conseguida en Sudáfrica.
– Foto: C. Rubio (RFEF)
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