"Hay que recordar que quienes escriben para los imbéciles siempre tienen un numeroso público de lectores". Arthur Schopenhauer
Ha llovido mucho en la ribera del Tajo desde que los leones de Lisboa levantaran su última liga. Fue en el 2002, con un equipo capitaneado por el ilustre Pedro Barbosa y con escuderos de lujo como Sa Pinto, Rui Jorge, João Pinto, Beto, Nelson o Paulo Bento. Las cosas iban viento en popa para el Sporting de Portugal. Jardel era bota de oro y una camada de jóvenes promesas iba dando que hablar: Cristiano Ronaldo, Quaresma o Hugo Viana nacieron como futbolistas viendo a la última generación ganadora.
Una década después, algo no va bien en Lisboa. Primero fue Sa Pinto, luego Frank Vercauteren y ahora es Jesualdo Ferreira el que intenta salvar al Sporting de Portugal de una temporada ridícula. Tras 21 jornadas disputadas tan solo suman 23 puntos, 7 por encima del descenso y a 32 del líder, que para más daño es el eterno rival de la ciudad, el Benfica. Un bagaje muy pobre para uno de los equipos más laureados de Portugal con 18 títulos en su haber.
La crisis es absoluta. Desde las gradas del José Alvalade se pide la cabeza de Miguel Godinho Lopes, presidente del club. El movimiento Dar Rumbo al Sporting ya ha entregado a la Asamblea General del club las firmas necesarias para realizar una Asamblea Extraordinaria para poder revocar al presidente, en el cargo desde marzo del 2011. Sin embargo, faltan por reunir 30.000 euros para la celebración de dicha reunión.
A Godinho Lopes se le acusa de ser el responsable de los malos resultados, ya que no ha acertado con sus decisiones. Los aficionados no olvidan que prescindiera de dos hombres claves en la gestión del club: Luís Duque, administrador de la sociedad, y Carlos Freitas, director deportivo y artífice de grandes fichajes. Además, la designación de Jesualdo Ferreira como entrenador del club no convence mucho a la grada, teniendo en cuenta que él es el director deportivo y el culpable del fracaso de algunos jugadores.
El escándalo manchó al presidente cuando el exvicepresidente del club, Paulo Pereira, se vio obligado a dimitir por estar imputado en delitos de blanqueo de dinero, estafa y malversación. La acusación a Pereira (exinspector de policía) salpica al propio Godinho Lopes, ya que, según la Fiscalía, el actual presidente pudo haber autorizado la contratación de una empresa para espiar a sus jugadores.
Ventas/Fichajes Sporting de Portugal |
Principales Fichajes (en millones de euros) |
Principales Ventas (en millones de euros) |
Balance |
2009/2010 |
Sinama.P (7), João Pereira (3), Matías Fdez.(3’5), Pedro Mendes (1’5). |
Paulo Bento (entrenador) (0) |
-15 Millones |
2010/2011 |
Torsiglieri (3’5), Valdés (3’5), Evaldo (3), Zapater (2), Nuno Coelho(1). |
Joao Moutinho (11), Miguel Veloso (9), Liedson (2) |
9’5 Millones |
2011/2012 |
Elias(9), E.Insúa(2), Jeffren(4), Van Wolfswinkel (5), D.Capel (3’5), Bojinov (2’5), Rinaudo (2), Schaars (1’5) |
Vuckecevic (3), Helder Postiga (1’5), Nuno Coelho (0’5) |
-28 Millones |
2012/2013 |
Viola (4), Rojo (4), Labyad (1) |
Elías (0’7*), Carriço (0’75), Matías Fdez. (3’5), João Pereira (4), Valdés (1’75) |
1’5 Millones |
Total |
-32 millones de euros |
Como suele ser normal en estos casos, cuando no funciona bien institucionalmente un club, tampoco lo hace económicamente. Un pasivo de 138 millones de euros sitúa al club en quiebra técnica. Tantas temporadas lejos de Europa y los pocos ingresos en la venta de jugadores han matado al club.
En este balance de las últimas cuatro temporadas podemos ver que el club ha perdido mucho dinero en fichajes que no han rendido al nivel esperado. Además de la mala gestión hay que sumarle la poca cantera que han sacado durante estos años, cuando el Sporting de Portugal siempre se ha caracterizado por tener una gran escuela de futbolistas (Figo, Futre, Cristiano Ronaldo, Nani, Quaresma, etc).
Desde la marcha de Paulo Bento el club no levanta cabeza. Llegó a semifinales de la Europa League la temporada pasada, pero el conjunto lisboeta no consigue clasificarse para la Champions League desde la temporada 2008/2009. Un lastre demasiado grande para un histórico.
La plantilla es buena y tiene jugadores con futuro, pero todo el ambiente extradeportivo no hace más que mellar la ya hundida moral del equipo. Van Wolfswinkel, Capel, Cedric, Rui Patricio o Marcos Rojo son grandes jugadores, aunque están rindiendo muy por debajo de su nivel.
Aún quedan nueve partidos por jugarse y son 6 los puntos que les separan de Europa. Con la Champions ya perdida, las esperanzas lisboetas a corto plazo están en alcanzar la 5ª posición. A largo plazo necesitan una renovación institucional del club, una limpia de directivos y un nuevo proyecto que lleve a la institución a donde se merece: a pelear como un grande.
* Marc Pons es periodista.
– Foto: EFE
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