"Se llama genio a la capacidad de obtener la victoria cambiando y adaptándose al enemigo". Sun Tzu
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Si paseásemos por los alrededores del Benito Villamarín en un día de partido o por las inmediaciones de la Ciudad Deportiva Luis del Sol, donde habitualmente entrena el club verdiblanco, y preguntásemos por el jugador de la cantera en el que tienen más esperanzas puestas y que más ilusión ha levantado, ese sin duda alguna sería Álvaro Vadillo. La joya verdiblanca ha vuelto a los campos tras romperse el ligamento cruzado de su rodilla derecha el 15 de octubre de 2011 en el Santiago Bernabéu tras una carrera con Sergio Ramos. En lo poco que ha jugado esta temporada ya ha dejado grandes detalles de su calidad, por ejemplo sentenciando en el Benito Villamarín al Valladolid en la Copa del Rey en menos de media hora.
Ha sido definido por el propio Pepe Mel como “el máximo exponente de la cantera”. Presentamos al que seguramente sea la referencia en el costado del Betis en pocos años y probablemente en la Selección española.
FICHA TÉCNICA
Seguramente sea el aspecto donde Vadillo tiene más margen de mejora. Uno de sus apodos es el Fideo así que no es muy difícil adivinar cuál es su aspecto físico. A pesar de tener una gran punta de velocidad y mucha explosividad, el de Puerto Real necesitará una buena preparación física y muscular para aguantar el ritmo de los partidos y los contactos con los defensas de Primera División. Un buen tren inferior será básico para desarrollar ese gran potencial que tiene.
Es un jugador muy inteligente tácticamente. Sabe dónde situarse en cada acción para no desperdiciar ni un ápice de su calidad y potencia. Sin reparos a la hora de defender y correr metros hacia atrás, es una de las claves en las acciones de contraataque para dar una salida rápida al balón y provocar acciones de gol. Partiendo desde la banda izquierda, muy escorado a la línea de cal, ocasiona muchos problemas a las defensas rivales a causa de su gran velocidad y capacidad de desborde, con llegada a línea de fondo en la mayoría de sus acciones.
Llegamos a su punto fuerte. Jugador diestro sin excesivos problemas para usar su pierna izquierda. Domina la mayoría de registros en el dribling, sin miedo a jugarse el uno contra uno en cualquier oportunidad que tenga y encarar a cualquier rival. Esta gran técnica le permite improvisar a según lo que requiera cada acción del partido. Otro aspecto muy positivo del canterano es su capacidad para jugar por la banda con la cabeza levantada; eso le permite saber donde está situado el ‘9’ para así llegar a línea de fondo y dar el pase de la muerte en condiciones óptimas.
* Álex Lebron.
– Foto: EFE
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