Las permutas ofensivas en el juego de posición

por THE TACTICAL ROOM el 24 agosto, 2016 • 11:53

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En el análisis táctico de los equipos que practican el juego de posición –aun en el estudio más somero– es insuficiente utilizar un mero esquema general de posiciones y tratar de explicar los movimientos del equipo mediante flechas o recursos semejantes. La esencia de ese fútbol, que no sólo asigna zonas a cada jugador en fase defensiva, sino otras distintas y específicas en la fase ofensiva e incluso en las transiciones o en momentos parciales de cada fase –consideremos la larga duración de las posesiones– obliga a trabajar como mínimo con un esquema defensivo y otro ofensivo para tratar de entender cómo se sitúa y mueve un equipo.

Juan Ramón Lara profundiza en todo ello en el número 23 de The Tactical Room, para lo que analiza dos de los equipos que mejor emplean dicho modelo de juego: Bayern de Múnich y FC Barcelona.

El Bayern de Múnich de las últimas temporadas, y en particular de la 2015-16, ha sido un ejemplo prototípico: la riqueza de planteamientos –durante el curso, pero también dentro de cada partido– convertía en un verdadero galimatías cualquier intento de simplificar su juego a un mero dibujo único y unas flechas. La clave de sus movimientos es una libertad ordenada en la que, en cada sector, cualquier jugador puede ocupar cualquiera de las tres posiciones, pero siempre ha de coordinarse con sus otros dos compañeros para que las tres posiciones queden cubiertas, y así los espacios queden bien repartidos. Naturalmente hay ciertos movimientos y situaciones preferidos, más convenientes para este encuentro o el otro, pero no hay flechas ni dibujos –ni heatmaps– que puedan explicar la riqueza de movimientos posibles: Lahm puede aparecer como interior (el famoso lateral-interior), pero también abrirse como un lateral convencional o incluso adelantarse como delantero; Costa suele abrirse a la banda para recibir como carrilero, pero a veces se atrasa por dentro o queda arriba en zona de remate; Müller suele pisar la posición más adelantada, pero también sabe abrirse o jugar como interior convencional. Hay un total de seis posibles permutas entre tres elementos.

Un caso curioso es el del Barcelona de Luis Enrique. Su sector izquierdo suele moverse en ataque de una forma muy estándar: Neymar como delantero por la izquierda (extremo moderno, tendente a zonas interiores), Iniesta como interior y Alba como lateral que sube siempre por fuera. Sin embargo, en la zona derecha hay absoluta libertad para Messi, no sólo descargado de obligaciones defensivas sino con carta blanca para moverse como desee en ataque.

El análisis completo puede leerse en The Tactical Room, en su edición número 23: LAS PERMUTAS OFENSIVAS EN EL JUEGO DE POSICIÓN