1.- El Real Madrid se impuso por 4-0 al Sevilla en un partido en el que atacó mucho y bien. El retorno de Karim Benzema es una magnífica noticia para Zinedine Zidane. El delantero francés activa, conecta y mejora a sus compañeros de ataque. La peor noticia fue que Keylor Navas tuvo que intervenir con acierto hasta en cinco ocasiones, lo que indica claramente que sigue siendo necesario trabajar sobre la idea de mejorar el equilibrio defensa-ataque y el balance defensivo.
2.- El Madrid fue mejor desde el inicio, y quizá haya encontrado un trozo de madera al que agarrarse con fuerza de aquí a final de curso. Zidane alineó tres centrocampistas puros: Casemiro como mediocentro defensivo y Modric y Kroos como interiores. Parece lógico apostar por jugar con tres centrocampistas de verdad si van a jugar juntos Bale, Benzema y Cristiano. El sistema a día de hoy sigue teniendo muchos puntos débiles, pero trabajar sobre esa idea a un mes vista de los cuartos de final de la Champions parece consecuente. Veremos si tiene continuidad.
3.- La primera media del Real Madrid en ataque fue extraordinaria. Se adelantó a los seis minutos por medio de Karim Benzema, que remató de maravilla un buen centro de Gareth Bale desde la banda derecha, y durante los minutos siguientes solo le faltó puntería. Atacó mucho y bien, llegando por fuera, descolgando los interiores y apareciendo los tres de arriba por todos lados. El Sevilla no tenía forma de aguantar el vendaval.
4.- El conjunto andaluz no tenía opción de instalarse en campo contrario. Emery dobló los laterales de inicio para intentar protegerse por fuera: Coke y Diogo en la derecha; Trémoulinas y Escudero en la izquierda. Krychowiak y Cristóforo jugaban muy en paralelo e Iborra naufragaba entre líneas. El equipo hispalense solo encontró el recurso de buscar en largo a Kevin Gameiro. El francés es un delantero extraordinario y él solo consiguió que su equipo fuera más largo y punzante. Se midió en varias ocasiones a los centrales del Madrid, pero encontró un Varane excelso que iba en moto al corte.
5.- La mejor noticia para el Madrid es que llegaba y remataba mucho. La peor, que siendo mucho mejor que su rival, Keylor Navas tuvo que aparecer hasta en dos ocasiones antes del descanso para evitar el empate. Una de ellas en el penalti que le paró a Gameiro. Varane agarró reiteradamente a Rami y el tico adivinó y despejó el lanzamiento del delantero francés. El resultado, tras concluir los primeros 45 minutos era corto para los méritos ofensivos del Real Madrid, pero su habitual desequilibrio a la hora de compensar ataque y defensa le pudo costar irse al vestuario con el encuentro empatado. El árbitro anuló un tanto de Gameiro, que lindaba con el fuera de juego.
6.- El segundo acto comenzó por los mismos derroteros. El Madrid seguía atacando mucho y bien. La presencia de Casemiro libera a Modric y Kroos; el croata lo aprovecha conduciendo y llegando a la frontal, donde más y mejor juega, para habilitar a los laterales y filtrar balones entre líneas. El alemán, para llegar a la frontal y disparar con peligro en varias ocasiones. El Sevilla seguía respondiendo con ataques directos, sin mucha elaboración. Con el paso de los minutos fue llegando más y encontrando un Keylor Navas cada vez más poderoso.
7.- Cristiano Ronaldo jugó su partido particular, como casi siempre. El portugués estuvo activo y participativo, con ese punto agónico con el que juega ya casi siempre. Un penalti, inexistente, de Reyes a Modric, lo desperdició el portugués enviando el balón alto. A la siguiente no perdonó y apareció en boca de gol, con una aceleración previa magnífica, para marcar el segundo tras una buena jugada previa entre Modric y Danilo.
8.- El 2-0 fue ya una losa insalvable para el Sevilla. Emery fue haciendo cambios. Tras el descanso dio entrada a Reyes por Diogo, deshaciendo el blindaje que había armado en banda derecha. Más tarde y, ya con 3-0, dio entrada a Juan Muñoz por un Iborra que no apareció en todo el partido. Para entonces, el Madrid ya jugaba desinhibido, asumiendo que le iban a llegar, pero con una alegría contagiosa en ataque.
9.- Marcelo aparecía una y otra vez. Y Bale completó un partido magnífico, tomando como punto de partida la banda derecha, pero apareciendo por todos lados. El Madrid atacaba con muchos jugadores. Zidane retiró a Bale y dio entrada a Jesé. Antes de irse, el galés había firmado el tercer tanto de la noche aprovechando un balón picado con astucia por Karim Benzema. Más tarde, James entró por Casemiro e Isco sustituyó a Benzema. El equipo blanco terminó jugando con Kroos como mediocentro, James y Modric como interiores e Isco y Jesé acompañando a Cristiano. Así llegó el cuarto tanto en una acción en la que Jesé hizo una de sus clásicas conducciones para terminar definiendo tras un rebote que le favoreció.
y 10.- James e Isco parecen los más perjudicados si Zidane apuesta de aquí al final de temporada por jugar con la BBC y tres centrocampistas puros. Parece una idea consecuente. Ser sólido no es cuestión de un día y el Madrid no anda sobrado de tiempo, pero dar continuidad al once de esta noche, de mediocampo en adelante, parece una solución a corto plazo a la que agarrarse para intentar competir con éxito en Europa.
* Alberto López Frau es periodista.
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