En su presentación, Tito Vilanova descartó de pleno esta posibilidad, la cual se apuntaba desde todos los medios. Sin duda, habrá quien atribuya esta decisión a la aceptación sin condiciones de la política austera de la actual junta. No obstante, muy probablemente se equivoquen, pues la confianza (justificada) en los jugadores de la plantilla y la ausencia de un valor seguro en el mercado son hechos incuestionables. Pues bien, analicemos en profundidad las razones de esta decisión.
En primer lugar, hay tener en cuenta que la baja producción goleadora de los acompañantes de Messi se debió fundamentalmente a las lesiones y a las variantes tácticas introducidas por Pep (lo que incluso reconoció en rueda de prensa), buscando extremos más fijos y centrocampistas que jugaran más cerca del área. Ello, cuantitativamente, dio un buen resultado, dado que los números goleadores del equipo mejoraron respecto a otras temporadas. No obstante, sí se echó en falta a otro delantero capaz de decidir partidos claves cuando Messi no lo ha hecho, más allá de que Alexis lo haya conseguido (o haya estado cerca de conseguirlo) en alguna ocasión. También Pedro, si bien no lo hizo hasta el último encuentro de la campaña.
– Lionel Messi, 25 (como todas las edades, al finalizar 2012). No seré yo el genio que defina con acierto al mayor asesino de adjetivos jamás visto.
– David Villa, 31. Una lesión de gravedad le apartó del equipo la mayor parte de la temporada, la cual debía ser la de su consolidación en el conjunto culé. Es más, durante el tramo del curso en el que pudo participar, dio muestras de reducir el notable rendimiento del curso anterior, llegando incluso a perder la titularidad en partidos importantes. Si bien es imposible predecir su nivel futuro (y, con ello, la conveniencia de un traspaso que parece descartado), la vuelta tras un gran periodo de inactividad, junto con el riesgo de recaída, genera muchas dudas a su edad. Sin embargo, a su favor juegan su compromiso, esfuerzo, experiencia y extraordinaria regularidad mostrada a lo largo de su carrera futbolística, con unos números como mínimo notables en todas sus anteriores temporadas en 1ª División.
– Pedro Rodríguez, 25. También las lesiones le han condenado a no estar a la altura este curso. Si bien ninguna de ellas ha sido de enorme gravedad, el elevado número y continuidad de las mismas le han impedido alcanzar la regularidad necesaria para demostrar su potencial, el cual, además, vive muy ligado a un físico que no le ha acompañado. ¿Es esto suficiente para plantearse un traspaso, tras su brillante rendimiento en las dos temporadas completas en las que ha formado parte del primer equipo y su papel clave para convertir a España en campeona del mundo? Bajo mi punto de vista, rotundamente no. De hecho, teniendo en cuenta su edad, lo extraño sería que no recuperara su mejor nivel (la final de Copa refuerza enormemente esta teoría).
– Alexis Sánchez, 24. Tras su primera temporada, deja sensaciones muy buenas por lo general. Una notable adaptación al juego del equipo, con actuaciones brillantes en las 3 posiciones del ataque (incluso en partidos de máxima trascendencia, como el de Liga en el Bernabéu) y una buena actitud e integración en el plantel juegan a su favor. A pesar de ello, sus cifras goleadoras no han estado a la altura de un titular indiscutible de este equipo. A la hora de valorar este hecho, no cabe olvidar que la primera temporada para un jugador que procede de una cultura futbolística diferente siempre es la más difícil y que las lesiones tampoco le han respetado. De todo ello se infiere que lo más lógico es que, de inicio, parta como uno de los titulares que acompañen a Messi en el ataque culé.
– Ibrahim Afellay, 26. Una grave lesión ha provocado que se olvidara de la temporada de clubes, más allá de alguna participación intrascendente con la Liga ya perdida. Siendo su adaptación al equipo hace 9 meses todavía una incógnita, las irrupciones de Cuenca y Tello como ocupantes del rol que le estaba reservado (el de extremo puro, distinto al de extremo-delantero de los 3 anteriores; de hecho, Isaac ha demostrado que, como él, puede retroceder y combinar como un interior y Cristian que es capaz de alcanzar a contrarreloj la línea de fondo) hacen difícil su continuidad (a no ser que se cuente con él como centrocampista, lo que tampoco parece plausible). No obstante, su indiscutible potencial y la completa recuperación mostrada en la Eurocopa podrían invertir esta situación.
– Isaac Cuenca, 21. Sin lugar a dudas, una de las revelaciones del fútbol español de la última temporada. Con una madurez impropia de su edad, ha dejado muestras de una comprensión del juego colectivo sobresaliente, además de aportar una buena capacidad combinativa y unos centros únicos. En su contra juegan su falta de olfato goleador, de una gran velocidad y la sensación de una disminución notable de su desborde al aumentar su conocimiento por los equipos rivales, lo que en el contexto híper-competitivo que tratamos puede provocar que tenga que completar su formación en otro club. Paradójicamente, la lesión que le va a tener apartado de los terrenos de juego hasta octubre hace más viable su continuidad.
– Cristian Tello, 21. Aparición de igual o mayor trascendencia que la del ex del Sabadell, respecto al cual difiere completamente a pesar de desempeñar una función similar. Sus cualidades, en especial su velocidad, son extraordinarias, pero necesita mejorar la lectura del juego colectivo, así como dar un paso adelante en la asociación con sus compañeros. Cabe preguntarse qué habría pasado si no hubiera fallado aquella clarísima ocasión delante de Casillas: ¿Tal vez llenaría portadas? ¿Habría sido reclamado mayoritariamente para la selección? ¿Lloverían ofertas dado que aún tiene contrato de jugador del filial (lo que parece que se resolverá dentro de muy poco)? En cualquier caso, si evoluciona como se espera, dispondrá de más ocasiones como aquella en el futuro. No obstante, tampoco tiene asegurada su continuidad en la plantilla la próxima temporada, por aquello del overbooking y la necesidad de minutos para crecer.
* Gerard Deulofeu, 18. El único motivo de que se encuentre en esta lista es que, a raíz de sus exhibiciones en el filial en el tramo final de la temporada y en la Eurocopa Sub-19, se está hablando de él mucho más de lo que los responsables del club desearían. Cabe recordar que, al margen de su indiscutible potencial, aún se encuentra en edad juvenil, tiene un carácter complicado y sólo acumula una temporada en el filial, por lo que, como mínimo, le queda otra para completar su formación. Por ello, a no ser que se repitiera la catástrofe de lesiones del curso pasado, no debería tener el menor protagonismo en el primer equipo. Por último, me gustaría instar a recordar a aquellos que quieren precipitar su ascenso los casos de Bojan y Giovani Dos Santos.
“Antes de entrar, dejen salir” es una máxima que se debería tener en cuenta antes de sacar a relucir nombres por doquier. Más aún en el caso del Barça, donde la confianza extrema en la cantera (que continuará sin lugar a dudas, como demostró a Zubi “al mirar abajo antes que fuera” cuando eligió a Tito) obliga a que las plantillas no sean largas. Ello conlleva que sólo 4 o 5 hombres acompañen a Messi, por lo que, sin fichaje, habrá 1 o 2 salidas y, habiéndolo (lo que a día de hoy parece descartado), 2 o 3. Siendo ésta la decisión más traumática, tristemente todos excepto Messi (y, tal vez, Alexis) han sido nombrados para formar parte de las bajas. A pesar de ello, cabría descartar también en este capítulo a Pedro y a Villa.
En cuanto a los demás, objetivamente, Afellay es el que cuenta más papeletas para causar baja por lo comentado, además de por la posibilidad de obtener un montante económico por su traspaso superior al que en su día se pagó por él. Junto al holandés, Cuenca y Tello podrían salir, con la particularidad de hacerlo bajo alguna modalidad contractual que les permitiera volver, en su caso, para tener un papel decisivo.
Partiendo de la base de que con seguridad Messi seguirá siendo el falso 9, pues de esta manera tanto el equipo como él han encontrado su mejor versión (además de que otras opciones como utilizarle en la derecha o como interior, o incluso modificar el sistema parecen descartables salvo como recurso extraordinario dado que la apuesta por Vilanova significa la apuesta por la continuidad, como él mismo ratificó en su primera comparecencia), nombres que han venido sonando como Llorente, Falcao o Van Persie se descartan por sí mismos (a este último incluso lo descartó su ex compañero Cesc en una entrevista por los motivos expuestos).
Ello significa que, de fichar, habrá de optarse por un delantero capaz de jugar en banda (que no un extremo, dado que Cuenca y Tello han demostrado capacidad para cubrir este rol, además de Alexis y Pedro).
Pero, volviendo a la pregunta, ¿es realmente necesario? Todo parece indicar que Alexis mejorará sus prestaciones la próxima campaña, y tampoco parece posible que ni Villa ni Pedro vuelvan a su mejor nivel, ni que, en caso de que uno de los dos no lo haga, no pueda ocupar aceptablemente un rol secundario. Con 2 de estos 3 acompañando a Messi a su mejor nivel, el ataque del Barça sería óptimo, como está comprobado. ¿O es que nadie se acuerda del MVP, cuyo rendimiento superó incluso al del trío formado por Messi, Eto’o y Henry? ¿Es que nadie se percata de que los 4 candidatos iniciales a acompañar a Messi en el ataque han tenido una temporada marcadísima por las lesiones?
Hagamos un ejercicio de imaginación: pensemos que los otros dos mejores equipos de Europa de la pasada temporada se hubieran visto en la misma situación. ¿Qué habría sido del Bayern con Olic y Mario Gómez fuera de los terrenos de juego la mayor parte de la temporada, y con Robben y Müller acumulando lesiones? ¿Y del Madrid sin Benzema y Callejón todo el curso, y con Higuaín y Di María permanentemente renqueantes?
Por otra parte, al margen de los aspirantes a la titularidad, si todo sigue su curso natural, Cuenca y Tello continuarán mejorando y Afellay se encontrará más adaptado. Si a ellos (a uno o dos de los 3, mejor dicho) les sumamos el jugador que quede de los aspirantes a la titularidad, también estarían garantizadas las alternativas desde el banquillo.
Desde fuera, por todo ello, la necesidad de fichar es discutible, dato confirmado tras la primera rueda de prensa de Tito, quien prepondera los factores apuntados a la hora de desdeñar esta posibilidad. Aún así, veamos cuáles habrían sido las opciones de haberse optado por fichar (o cuáles serían en caso de un cambio de criterio a todas luces inesperado).
Dada la peculiaridad del juego culé, la lista se reduce sobremanera respecto a otros conjuntos. No obstante, dado que la crueldad extrema de las lesiones con Rossi le ha descartado (si no, habría sido posiblemente la primera opción), antes de decantarse por un nombre, es necesario hacerlo por un perfil:
– Delantero top. Llegaría en principio para ser titular. De los citados para el Real Madrid, sólo se podría rescatar a Luis Suárez, Agüero y Rooney. A éstos, cabría añadir a Neymar y a Hulk.
Si bien todos ellos tienen en común una calidad descomunal, produciría también numerosas dudas su adaptación al estilo blaugrana, a las servidumbres tácticas en favor de Messi, a la asunción de un papel secundario en favor de éste último (lo cual Agüero y Neymar sí han dado a entender que harían) y a la aceptación de la suplencia, en caso de que se produjera. Todo ello, por no hablar del precio desorbitado que con toda seguridad tendría su fichaje.
– Menor cartel. En el caso del Barça, prácticamente las únicas opciones plausibles son Adrián y Muniain. En ambos casos, todas las dudas expuestas en torno a los anteriores quedarían disipadas, surgiendo otra distinta: ¿Superarían el nivel de lo que hay? Obviamente, sólo el tiempo podría responder a esta cuestión.
Esta opción parecía haber cobrado una gran fuerza, especialmente tras la eliminación ante el Chelsea y la falta de alternativas cuando, a falta de media hora para la conclusión de la misma, se agotaron las ideas. En una situación así, la presencia de un rematador habría permitido colgar balones, lo que colateralmente habría llevado a la defensa a vigilar más las bandas para evitar centros, dejando, en consecuencia, más espacios en el medio.
A la hora de abordar esta posibilidad, cabe recordar que, por muy grande que sea un club, no puede permitirse tener un jugador de primer nivel únicamente para este papel (como sucede con Llorente en la Selección). A ello se suma que, seguramente, un jugador de menor calidad, por mucho que tuviera estas características, no podría decidir desde el banquillo partidos vitales, función principal para la que se le requeriría.
Por ello, tendría que tratarse de un jugador de primer nivel que aceptara un papel residual, decisión que sólo cabría esperar de un veterano. Así pues, con Didier Drogba partiendo rumbo a China, quedarían Diego Milito y Miroslav Klose como excepcionales candidatos a ser “el nuevo Larsson”.
Finalmente, salvo sorpresa mayúscula, tampoco se optará por esta posibilidad, lo que da a entender que Tito continuará con la filosofía de Pep de desdeñar de pleno cualquier Plan B, limitándose a perfeccionar al máximo el tan fructífero Plan A.
* Rafael León Alemany. En Twitter @_rafaleon_
– Fotos: AFP – AP – Reuters – FC Barcelona
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